Simultáneamente a la difusión de falsedades sobre la amenaza de Ucrania, Rusia atacó la central nuclear de Chernóbil

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En la noche del 14 de febrero, el equipo del OIEA, presente permanentemente para vigilar la seguridad, detectó una explosión en el emplazamiento de la central nuclear de Chernóbil hacia la 01:50. Un dron ruso impactó contra el techo de la estructura de aislamiento situada en el lateral del Nuevo Confinamiento de Seguridad (NCS), que protege los restos del reactor 4, el mismo que explotó en 1986.

Según el OIEA, los bomberos y los vehículos acudieron en cuestión de minutos. Actualmente, no hay indicios de que se haya producido una brecha en la contención interna del NCS. Pero la amenaza era casi crítica.
La propaganda rusa difundió rápidamente en los medios de comunicación la falsedad de que fue Kiev quien creó la provocación para culpar al kremlin del ataque. Sin embargo, los restos encontrados demuestran que el avión no tripulado utilizado para atacar la central nuclear de Chornobil fue fabricado en rusia.
Además, el presidente Zelenskyy declaró en una conferencia de seguridad en Múnich que el dron de combate ruso volaba a una baja altitud de 85 metros, lo que dificultó que las unidades de defensa antiaérea lo detectaran a tiempo. Esto indica un ataque selectivo de los rusos contra la instalación nuclear.
Unos días antes del incidente, los rusos lanzaron una noticia falsa según la cual el ejército ucraniano había disparado contra el convoy del OIEA. En realidad, se trataba de un montaje, para el que los rusos utilizaron todoterrenos UAZ Patriot blancos de fabricación rusa con una «bandera de la ONU». Estos vehículos no llevan las marcas utilizadas por la misión del OIEA para indicar su presencia: ONU/OIEA. Además, los miembros de la misión del OIEA viajan exclusivamente en Toyota Land Cruisers blindados blancos con símbolos de la ONU. Cabe señalar que son los ocupantes rusos quienes siguen saboteando la rotación de la misión del OIEA, lo que crea el riesgo de una catástrofe en la central nuclear de Zaporizhzhia. Y es el ejército ruso el que ha bombardeado repetidamente las centrales nucleares de Ucrania. Y en la central nuclear ocupada de Zaporizhzhia sigue habiendo material militar y depósitos de munición del ejército terrorista de vladimir putin.
Todo esto demuestra la completa ineptitud de la banda del kremlin, que plantea amenazas reales a todo el mundo. Porque no hay fronteras para la radiación. 

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